viernes, 25 de noviembre de 2011

niños criados a bordo

Como dice este artículo, cada vez hay más familias que viven navegando por esos mares.
He tenido la suerte de conocer a varias de esas familias y la verdad es que los niños marineros son una gente cultísima, decentísima y realizadísima. Cada familia sigue un método de enseñanza: hay padres que se limitan a responder a las preguntas de sus hijos; hay quienes se proponen horarios de clase y no llegan nunca a cumplirlos; hay quienes se los proponen y los llevan a rajatabla. Lo normal es que se adhieran al sistema educativo de algún país y estudien a distancia, normalmente al final y pal examen, como cualquier alumno presencial. El sistema educativo francés tiene muchos adeptos entre los navegantes porque tiene sedes por todo el mundo para hacer los exámenes.

5 comentarios:

  1. ¡Qué interesante! Hay muchos padres que reclaman el derecho a educar a sus hijos según su propio criterio. Sin embargo, no todos los sistemas educativos/países lo prmiten. Al parecer, uno de los inconvenientes que le achacan a la no escolarización es la falta de socialización de los niños.
    CO10PI

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  2. Más que falta de socialización es que se trata de una forma de sociabilizar diferente. Hablo desde la experiencia y sin ningún rigor científico:

    Los niños, en vez de tener sus amiguitos de la escuela de todos los días, viven llegando a sitios nuevos con gente nueva. Pero no se presenta como algo traumático sino que, después de pasar varios días "encerrados" en el barco con la familia, los niños están deseando llegar y conocer gente nueva.
    En cada sitio pasan un tiempo. Normalmente, salvo en caso de avería, mal tiempo o similares, las familias se quedan más tiempo en los sitios que les gustan más. Allí los niños aprenden cantidad de cosas: idiomas, costumbres, mentalidades, oficios... En poco tiempo tienen buenos amigos por todo el mundo.

    Una cuestión de arraigo importante para los niños marineros es que cambian mucho de entorno, pero su casa es siempre la misma.

    El barco en sí ya es un medio social. El barco, que es la pieza clave de ese estilo de vida, requiere muchos cuidados. Los niños participan de todo el proceso y van aprendiendo los diversos oficios. Desde el arte de navegar hasta el trabajo en los varaderos, donde siempre se acerca alguien a participar (activa y pasivamente, sobre todo pasivamente: "Uh, así destrozarás el barco") y se forman "redes sociales" de profesionales y aficionados opinando, probando, aprendiendo juntos. Según la duración de los trabajos se llega a conocer a gente muy interesante de la que se aprende mucho. Los niños participan activamente en los quehaceres cotidianos de la vida en el mar sin ser segregados por su edad.

    Aunque claro, no todo el mundo lo hace del mismo modo.

    Resumiendo, que yo a pesar de que el tipo de socialización sea muy diferente de lo que se usa hoy en día (¿aunque no es un poco mentalidad 2.0 también?), estoy muy a favor de criar a los niños a bordo.

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  3. Totalmente de acuerdo!!!! Y, por lo menos los que yo conocí, eran muy abiertos y extrovertidos. Gente muy guapa la de mar!!!(bue hay de todo, como en todos lados)

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  4. Muy de acuerdo con la vida a bordo , en si mismo la convivencia es un reto diario , la calidad humana bajo mi punto de vista se multiplica , cuando estas en un sitio con tu familia y tu barco , todo es una gran familia , por experiencia ,yo he tenido el gusto de conocer ( y experimentar por un tiempo ) a gente que lleva 30 años en sus barcos con muchos hijos , un caso me impacto , tenian 11 hijos hablando minimo 4 idiomas ¡¡¡ las tareas , el tiempo , el espacio todo compartido y disfrutado ,,

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    1. ¡nooooooo! ¡¿¡¿11 hijos!?!?!? madre mía del amor hermoso. yo pensaba que 2, 3 hijos... jolines, 11! ¿en un barco grande? angie, me acuerdo en tu barco: con 4 niños había gente por todas partes!!! me encantó ver lo bien que os manejabais.

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